El granito blanco es uno de esos materiales que, cuando los ves, simplemente te enamoras. Lo he visto usado en encimeras de cocina, paredes y claro, también en suelos. La gran pregunta que muchos se hacen: ¿es realmente adecuado para suelos de alto tránsito? Mi experiencia dice que sí, pero vamos a profundizar en ello.
Primero, hablemos de la durabilidad. Sí, tiene una dureza impresionante. Según la escala de Mohs, que mide la dureza de los minerales, el granito se sitúa en una puntuación de 6 a 7 sobre 10. Eso es bastante alto, especialmente si lo comparamos con otros materiales como el mármol, que tiene una puntuación de 3 a 5.
En mi oficina, hemos instalado granito blanco en el recibidor, que es una de las áreas de más alto tránsito del edificio. Diariamente, unas 500 personas pasan por allí, y después de tres años, sigue luciendo casi como nuevo. Se nota algo de desgaste pero no es realmente relevante. Eso me sorprendió mucho porque pensaba que necesitaríamos reemplazarlo mucho antes.
Además, te puedo decir que el costo inicial de instalar granito blanco puede ser un poco elevado. Normalmente, el precio por metro cuadrado ronda los 60 a 100 euros, dependiendo de la calidad y del proveedor. Sin embargo, la inversión se recupera a largo plazo debido a su durabilidad y bajo mantenimiento. En comparación, el mármol suele estar en un rango similar de precios, pero requiere mucho más cuidado y puede rayarse o mancharse con mayor facilidad.
Hablemos ahora de una preocupación común: el resbalón. ¿El granito blanco es resbaladizo cuando está mojado? Absolutamente, como la mayoría de los suelos naturales, puede serlo. Pero una solución efectiva es aplicar un tratamiento antideslizante. Nosotros lo hicimos en el baño de nuestra oficina porque alguien resbaló una vez, y desde entonces no hemos tenido más incidentes. Es un gasto adicional, claro, pero por la seguridad vale la pena.
Un aspecto que no todos consideran es el mantenimiento. El granito blanco es bastante resistente a las manchas, pero como todo, no es infalible. En nuestra experiencia, limpiar cualquier derrame inmediatamente es clave. Utilizamos un limpiador específico para piedra natural que cuesta unos 10 euros el litro, y con una limpieza semanal, mantenemos el suelo en condiciones óptimas. Al final, gastamos unos 200 euros al año en productos de limpieza, lo cual no es mucho si comparas con otros materiales que requieren tratamientos más costosos.
Algo que aprecio del granito blanco es su versatilidad estética. Va bien prácticamente con cualquier estilo de decoración, desde el minimalista hasta el más clásico. En nuestra sala de reuniones, tenemos un pavimento de granito blanco combinado con muebles de madera oscura, y el contraste es simplemente magnífico. Recentemente, leí un artículo en una revista de diseño que decía que la combinación de colores claros en el suelo con muebles oscuros está en tendencia, y seguro que muchos arquitectos y diseñadores estarían de acuerdo.
Déjame contarte sobre una noticia reciente: el aeropuerto de Barajas en Madrid reemplazó sus suelos de mármol por granito blanco en varias de sus terminales. La razón principal fue la resistencia al alto tráfico de pasajeros, que excede los 60 millones anuales. Según un reporte, esperan reducir los costos de mantenimiento en un 25% en comparación con el mármol, lo que es una cifra bastante significativa.
En conclusión, si estás considerando usar granito blanco para un suelo de alto tránsito, es una excelente opción. Es duradero, estéticamente versátil y, aunque puede tener un costo inicial elevado, la durabilidad y el bajo mantenimiento compensan con creces. Además, con algunos cuidados adicionales como un tratamiento antideslizante y una limpieza adecuada, puedes disfrutar de un suelo que no solo es bello sino también funcional por muchos años.
